Acabo de interrumpir mi trabajo, he desatendido a mi familia y abandonado las más elementales normas de higiene para poder haceros saber una noticia que me fascina. Mi nunca suficientemente admirado Lance Armstrong podría correr la Vuelta 2012 como preparación del Ironman de Hawai. Que un señor con 40 años, multimillonario y con un palmarés histórico sea capaz de someterse a la disciplina del entrenamiento para alcanzar nuevos logros, es algo fuera del alcance de los humanos.
Los que piensen que todo esto es producto de un plan de dopaje, o no entienden de dopaje, de bicicletas o de ninguna de las dos cosas.
Lance, eres un soberbio ejemplo para todos. Ojalá sea cierto.